La idea generalizada sobre la perspectiva de inversión que tienen los millenials -la generación nacida entre 1984 y 1995- es que tienen miedo a invertir en acciones y que confían más en el efectivo tras haber presenciado la, todavía latente, crisis financiera de 2008.
Esta idea se ha visto reforzada por una encuesta de Bankrate.com dirigida a descubrir qué opciones consideraba mejores la generación millenial a la hora de invertir. En la encuesta, las acciones aparecían en el cuarto puesto muy por detrás de los inmuebles, el efectivo y el oro.
En la encuesta de BlackRock’s 2017 Annual Global Investor Pulse, los datos son similares. El 65% de los millenials prefieren el efectivo. Lo mismo sucede con la encuesta Legg Mason Global Asset Management, cuyos resultados indicaban que los millenials sólo habían invertido el 15% de sus ahorros en acciones.
Sin embargo, dos recientes estudios revelan una realidad muy contraria sobre cómo invierte la generación millenial su dinero para la jubilación.
El primer estudio, publicado por el Employee Benefit Research Institute, arroja luz sobre cómo reparten sus ahorros entre una serie de inversiones. La muestra utilizada para la encuesta aglutina a participantes de diferentes edades.
El 80% está invirtiendo en acciones de fondos para jubilación
La investigación descubrió que los encuestados de sesenta o más años eran los que menos invertían en acciones, un 55% de media. Por el contrario, el 80% de las personas que están en la veintena o la treintena sí que invertían en acciones.
La respuesta a esta elevada cifra, probablemente, se halle en el tipo de inversión. El 90% de esos activos pertenecían a fondos de jubilación diseñados, precisamente, para personas de veinte y treinta años. Pero, en cualquier caso, estos estudios desmienten la idea preconcebida de que los millenials tienen miedo a invertir el dinero que ahorran para la jubilación.
El segundo estudio fue publicado por Wells Fargo Investment Institute, y los resultados son similares al otro estudio. Esta vez, la investigación analiza cómo clientes de la generación silenciosa (1925-1945), baby boomers (1946-1964), generación X (1965-1984) y milenials (1984-1995) reparten su dinero en cuentas de inversión. La generación X y los millenials son los que más tienden a invertir en bolsa, concretamente en torno al 68% de su cartera de valores en ambos grupos.
La diferencia entre ambos estudios radica en que el primero se centra en la inversión en fondos de pensiones, mientras que la investigación de Wells Fargo versa sobre múltiples tipos de inversión, ya sean a corto o largo plazo. Probablemente, esa sea la razón por la que el tanto por ciento de millenials que invierten en acciones sea menor en el caso de la investigación de Wells Fargo.
Por otro lado, hay un tercer estudio publicado recientemente por Investment Company Institute. En este estudio se comparan la distribución de activos correspondiente a los que hoy están en su veintena y la de los que tenían entre veinte y treinta años en 1996.
Desconfiados respecto a los fondos tradicionales
Los investigadores hallaron varias diferencias entre ambos grupos. La diferencia principal es que los inversores jóvenes en la actualidad, es decir, los millenials, son más desconfiados respecto a los fondos de acciones tradicionales y apuestan más por los fondos de inversiones con fecha establecida, como es el caso de los planes de pensiones.
El resultado general es muy similar al de los otros dos estudios anteriores. La cartera de valores de los jóvenes de 1996 era del 77%. En cambio, la cifra de los jóvenes millenials de la actualidad es ligeramente superior, el 80%.
En definitiva, estos tres estudios muestran que la idea de que los millenials están aterrorizados por el pánico generalizado que dejó a su paso la crisis económica de 2008, es más un mito que una realidad, ya que, en realidad, invierten más en acciones que las generaciones anteriores, aunque mayoritariamente sea en fondos de inversión a largo plazo.
De todas formas, cabe recordar que la edad no es el único parámetro que debe incidir en la estrategia de inversión de una persona. Existen otros factores decisivos que repercuten directamente en los hábitos de inversión, por ejemplo, el nivel de tolerancia al riesgo, o cuándo se van a necesitar los beneficios que genere la inversión realizada.
Para conocer nuestras posibilidades individuales de inversión y saber cómo modelar nuestra cartera de valores de acuerdo a nuestros intereses, existen cuestionarios en internet que nos pueden ayudar a planificar una estrategia de inversión, independientemente de si eres millenial o no. El cuestionario de Vanguardia para conocer la tolerancia al riesgo de invertir es un ejemplo de ello.